11 ene 2011

Presión

Son de nostalgia, negro presagio. Confusión y caos. 
Vétigos por estar al borde del mañana, entre hoy y ayer. 
Tormentoso revuelo en el corazón que tamborilea 
entre acongojado y resistiendose al fracaso, entre débil
y cobarde, entre sufridor y valiente. 
Se razga mi palabra, como papel, se razga. 
La primavera se escapa... sin flores me deja. 
Se muere el proyecto, me perturba el vientre, el cerebro
se me hace trizas. No hay sustento, no hay base.
Se deshace el fundamento. Migración, como el pájaro,
que es libre de ir y venir... en su devenir esclavo de su
naturaleza, de ir y venir. 
Océano, que en su monótono acariciar la arena de la costa,
de una y otra vez seducir a la tierra, tentarla de aquella 
lujuria, sueño eterno se agua y fluido que rebalsa de placer,
me conquista y me hipnotiza, me pierde en el mar de una crisis
de la que no salgo, un laberinto confuso, lleno de ideas, 
desiciones, peligros, prohibiciones, alegrías y tristeza. 
Parece encaminarse el felino hacia un oscuro destino, 
enterrando sus garras en profundo sentido.
Y enciende la pasión en el pecho el de los mil nombres, 
la angustia que se apodera como de un todo.
Desempolvo la esperanza, enterrada en el olvido 
y confío en ella, aunque en realidad, solo tengo miedo.  

9 ene 2011

ni aquí ni allá

Siento un pesar, en el corazón, en el vientre.
Es palpitar, es algo que se incuba prohibidamente,
como un presagio de vida nueva, de llanto y dolor,
no es alegre la vista, más bien lúgubre, la buena nueva. 
¿o mala nueva?... será quizá, la serpiente emplumada,
que se geste en lo profundo de mi alma razgada,
que da vida, que surge como el sol tras la tiniebla,
que lo esclarece todo, que todo ilumina. 

O será simplemente manantial de muerte, 
manantial que fluya, rojo como sangre y a borbotones,
manantial de falsa fertilidad que todo lo inunda, 
de oportunidad que se pierde, de vida muerta.
De nido podrido y olvidado, de nido sin crias, de paja, 
de polvo, de plumas, de lo que nunca pudo ser.
y olvido que sepulta el recuerdo, la posibilidad
difundirá en el agua el hedor horrible de la desesperanza.